En Lorenzana apostamos de manera clara por conservar las tradiciones mantequeras con las que nacimos hace ya un siglo. Desde el corazón del suroccidente asturiano, trabajamos cada día para ofrecer la mejor mantequilla a nuestros clientes, una mantequilla que evoca a la que antiguamente hacían las abuelas en las casas. Ese mismo espíritu es el que tratamos de mostrar en cada lata que sale de nuestras instalaciones en Tineo.
En este post, queremos explicar la esencia de nuestro saber hacer, lo que convierte a Lorenzana en una mantequilla completamente diferente a otras que se encuentran en el mercado. ¿Nos acompañáis?
Uso del manaser
En Mantequera de Tineo no elaboramos nuestros productos de manera industrial, si no que nos ayudamos de un instrumento artesanal denominado manaser, del que nos servimos para amasar la mantequilla. Consiste en una serie de mecanismos de rodillos que hacen que la mantequilla vaya cambiando en cada vuelta hasta obtener un olor, color, sabor y textura particulares. Actualmente, presumimos con orgullo de ser la única empresa en España que conserva esta técnica de elaboración.
Maestro mantequero
Además, en la empresa mantenemos la tradicional figura del maestro mantequero, un oficio que ha ido pasando de generación en generación y que guarda los secretos de un trabajo que exige un grado alto de conocimiento del producto. Gracias tanto a la experiencia como a la maña, el maestro mantequero se ayuda del manaser durante el amasado hasta que la mantequilla adquiere las cualidades óptimas para pasar al enlatado.
Ahora ya conocéis un poco mejor de dónde venimos y lo que nos permite ser los líderes en las ventas de mantequilla en lata en España. Si queréis ver de primera mano cómo producimos la mantequilla, podéis visitar nuestro museo enviando un mensaje al correo museo@mantequeradetineo.com
¡Muchas sorpresas os esperan!